Este patio central, típico de las casas romanas, servía de entrada principal y zona de recepción. Cuenta con un impresionante "impluvium" (estanque hundido) rodeado de intrincados frescos y columnas de mármol.
Este comedor está adornado con elaborados mosaicos que representan la vida marina y animales exóticos, dando a los visitantes una idea de los opulentos banquetes romanos. El más destacado es el que representa a Neptuno y Anfítrite, rodeados de conchas marinas.
Aunque dañado por las primeras excavaciones, el larario o "lararium", un santuario para las divinidades domésticas, proporciona información sobre las prácticas y creencias religiosas de los antiguos romanos.
La distribución de la casa incluye una tienda en la planta baja con un mostrador de comida y una cocina, además de un entresuelo de madera. Los visitantes pueden echar un vistazo a la vida cotidiana en esta ajetreada zona de cocina.
La Casa de Neptuno es una antigua villa romana bien conservada situada en el yacimiento arqueológico de Herculano. Ofrece una visión de los aspectos arquitectónicos y culturales de la época romana.
Sí, tus entradas para las ruinas de Herculano te dan acceso a todo el complejo arqueológico de Herculano, que incluye la Casa de Neptuno.
La Casa de Neptuno se construyó en el siglo I a.C., por lo que tiene más de 2 000 años.
Las ruinas de Herculano abarcan una serie de estructuras, incluidos edificios residenciales bien conservados, baños públicos, tiendas y diversos artefactos como cerámicas, esculturas y frescos. Explorar estas ruinas permite comprender la vida cotidiana de la antigua Roma.
Herculano ofrece senderos accesibles en silla de ruedas, lo que garantiza un fácil acceso a los visitantes con problemas de movilidad para explorar sus tesoros históricos.
Aunque no hay un código de vestimenta específico, viste cómodamente para caminar y explorar el yacimiento arqueológico. Lleva calzado cómodo, protección solar y ropa adecuada al clima para disfrutar de la visita.